Tras una parada de 36 horas, tocaba volver al festival con
todo lo que eso conlleva. A las 15:00 llego al Kursaal y consigo la última
invitación que quedaba para ver una de las películas que veré mañana. Por los
pelos, pero empieza bien la jornada. Llego a mi flamante hotel, me dan la llave
de mi suite y voy directo a la primera proyección de la tarde: Jusqu'à la garde (Custodia compartida).
La película de Xabier
Legrand nos presenta a una mujer que se acaba de separar de su marido y
este quiere la custodia compartida del hijo menor de ambos. Lo que empieza
siendo un drama cotidiano al uso, va creciendo en intensidad hasta llega a uno
de los mejores finales en lo que llevamos de festival. Como siempre, no
desvelaré nada del desarrollo de su cruda historia en estas líneas.
El León de Plata al Mejor Director y el premio a la Mejor
Ópera Prima en el Festival de Venecia son bien merecidos para el primer
largometraje de este director francés. A destacar también la interpretación de Léa Druckeren el papel de la madre. El
resto del reparto también está muy convincente en sus respectivos papeles.
La verdad es que salí del cine con la historia retumbando en
mi cabeza y con algo de mal cuerpo. ¿Qué más se le puede pedir al cine?
Tocaba volver a la sesión oficial con la segunda película de
la tarde. Y por coincidencias de la vida, era otra historia protagonizada por
una madre. Una especie de familia del
argentino Diego Lerman nos cuenta la
odisea de una mujer por “adoptar” en Argentina. Trata la problemática de los vientres de alquiler en el país sudamericano.
Si bien la película en general es correcta, se sustenta
básicamente en la actuación de una (superada en la ficción) Barbara Lennie que borda el papel. Firme
candidata a la concha de plata a mejor actriz de este festival por ahora.
Y para terminar la jornada, qué mejor que algo menos
intenso. Me escapo para cenar algo rápido por las calles de lo viejo y,
sin darme cuenta, ya estoy esperando para entrar en el documental Wonders of the sea 3D (Maravilla del mar
3D). Aquí, Jean-Michel, el hijo del señor Costeau, nos muestra un alegato ecologista en toda regla. Narrada y
producida por Arnold Schwarzenegger, el
mayor aliciente para verla es la calidad de las imágenes que se nos muestran.
En la cinta podremos disfrutar de los fondos marinos de
Fiji, Baja California y Bahamas. Siendo el buceo en arrecifes de coral una de
mis debilidades, no puedo ser muy objetivo en esta ocasión. Muy interesante la
vida macro (la vida diminuta) que aparece.
Resumen para vagos del día 3
Jusqu'à la garde: muy interesante.
Una especie de familia:correcta.
Wonder of the sea 3D: para amantes de los fondos marinos.
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